panic at the beach

me escapé a mar del plata casi sin pensarlo, compré el pasaje sin saber siquiera si conseguiría los días que necesitaba. unos días después estaba viajando con fla a la feliz, estando feliz, queriendo estar feliz.

salí, me emborraché como yo sólo sé (sé, así de mal). y otras cosas, otras cosas que tal vez ni siquiera en el blog haya que escribir. esas cosas, jajaja. Aventura, aventura sin fin. Dos días de pasear sin rumbo por no tener donde parar. Eso es aventura, improvisación, espontaneidad, algo de lo que nunca fui partidario pero de lo que fui parte. fuck the world, fuck the money, fuck everyone. me comí gente linda, a la que luego le lloré. bailé como los dioses, me deprimí por lo de siempre, quise estar solo, estuve con mi familia, pero quise estar solo de todos modos.

vi a panic at the disco, luego de años y años de soñar con brendon urie, con lo que haria en el momento en que escuchara Camisado o alguna parecida. y aprendí a ver a mgmt, una banda que nunca había escuchado con atención pero que me hizo sentir enfiestadísimo. arena bajo los pies, arena en el aire, burbujas, el sol poniéndose, trance, el mar de un lado y gente por todos lados, los brazos en el aire. era perfecto, era lo más cercano a la perfección que he experimentado últimamente, era como si de repente no fuese yo, sino que estuviese tomando prestada la vida de alguien para sentirme tan ordinario, tan en el lugar y en el momento CORRECTO. nada más que eso.

y luego el dedo en la herida. la hermione de ron, la bella de edward, la lors de alito, la lu de emi, de nuevo, todo el tiempo. recordándome que caminaba solo por la costanera, pero que no lo estaba en realidad. poniéndome enfrente un contrato que decía 'A CAMBIO DE UN MOMENTO DE PERFECCIÓN SE TE VA A RECORDAR QUE NO ESTÁS CON ALGUIEN', pero si estaba con alguien! no estaba en realidad, pero sí estaba. no quiero ser egoísta. de nuevo en capital seguía pensando lo mismo, sigo pensando lo mismo. hagrid soy. no hay madame maxime's por acá. serían tan fácil de ver. todo en mí grita que me equivoqué, que estuve dando pasos equivocados todo el tiempo. todo el tiempo de mi vida. y otra voz más fuerte grita que no puedo hacer nada para cambiar eso. que ahora tengo que tratar de corregir el curso, pero las huellas que dejé atrás no se van a borrar.

estoy intentando corregir el curso, cosas nuevas, gente nueva, ambiente nuevo, trabajo nuevo. todo nuevo, todo distinto, todo ligado pero a la vez ajeno. no quiero no intentar, hay que intentar. me comí a federico, 4 o 5 años después de haber estado enamorado de él. todo llega, es sólo que uno no sabe cuándo. nunca se sabe cuándo.